¡COLOMBIA SERÁ LIBRE O NO SERÁ!
A finales del año 1819 llega la noticia que desde
España se estaba alistando un poderoso ejército de 20.000 hombres de
infantería, 2.800 de caballería y 1.370 de artillería en una expedición escoltada por seis fragatas, diez corbetas,
varios bergantines y goletas y treinta cañoneras. Con ese alarde de poderío, el Rey de España pretendía
restablecer de una vez por todas, el orden colonial en sus colonias americanas.
Ante
esta situación el general Rafael Urdaneta planteo sin la más mínima sombra de
pesimismo o desanimo:
“Nos tocará tal vez morir antes de completar
la victoria, pero nunca nos rendiremos. Ni ante todo el poder de Europa o del
mundo lo haríamos. Colombia será libre o no será”
Anteriormente
el 22 de febrero de 1819 España había vendido a los EE.UU., la península de la
Florida, ….. el 17 de Diciembre de ese mismo año a instancia de Bolívar, el
Congreso de Angostura había decretado la ley fundamental de la República de
Colombia en la que queda planteado: “La República de Venezuela y la Nueva
Granada quedan desde este día reunidas en una sola bajo el titulo glorioso de República
de Colombia”
En
1830 El Libertador muere consumido por la enfermedad y la desilusión de no
haber logrado cristalizar la unión del país en el que el sueño de una solida
nación que se enfrentará de igual a igual al naciente imperio norteamericano,
el egoísmo de los caciques neo granadinos y venezolanos dio al traste con este
proyecto. El libertador fue vencido en parte por la geografía, la Colombia de Bolívar se encontraba ya dividida por cordilleras,
caudalosos ríos, inmensas selvas y llanos.
Hoy
a 199 años de estas palabras, Colombia ya no es Colombia, Venezuela por una
parte es una República Soberana Digna y Bolivariana, que se mantiene firme a los
ideales del libertador, y resiste con honor , valor y paciencia los ataques de
las potencias extranjeras, en una guerra denominada de cuarta generación.
Mientras tanto que la Nueva Granada “Colombia”
su gobierno continúa hoy siendo un virreinato sumiso, pero esta vez con un amo
diferente los EE.UU de Norteamérica. El Ecuador se debate entre el fantasma de
la traición y la Fe de un pueblo patriota que no desea volver al dominio
extranjero.
Ya Colombia no es la Colombia de otrora, y no
lo será hasta que las élites que la gobiernan no tomen conciencia nacionalista,
y gobiernen para su pueblo y no para quienes los someten militar, política y
económicamente.
El
pueblo digno no se merece lo que les sucede por culpa de los intereses
económicos de su oligarquía, el pueblo trabajador que habita tierras
colombianas más temprano que tarde despertara de una vez por todas de esa
pesadilla que mal gobierna su país, y retomara el camino de la justicia y la
equidad ciudadana, en donde ser Colombiano deje de ser un acto de fe.
El
gobierno colombiano se ufana de ser una de las democracias más sólidas del
continente, la propaganda de los medios colombianos y estadounidenses así lo
dicen, pero resulta que esto no solo lo avala su socio del norte, también lo
hace la comunidad europea. EE.UU tras ser el principal consumidor de drogas
tiene en la oligarquía colombiana al principal capo que se la suministra.
Colombia
tiene el más alto índice de sindicalistas y periodistas asesinados del mundo,
es uno de los países con mayor número de desplazados internos (en Venezuela
hacen vida un aproximado de 5 millones de colombianos). Colombia posee el
récord de masacres, desapariciones y secuestros de todo el continente americano.
Con la pacificación de las FARC y su proceso
de convertirse en partido político se logró avanzar en la culminación de la
guerra civil en ese país, pero existen intereses económicos internos y externos
en ese país que boicotean el proceso de paz, intereses que ya han logrado que líderes
y dirigentes de la antigua FARC sean asesinados por los paramilitares.
Al
colombiano se le lleno de miedo en las recientes elecciones diciéndole que la
oposición representaba al castro-chavismo, cuando la realidad era que ya
estaban planeando el fraude electoral, mismo que fue tan descarado, que hasta
permitieron sacar fotocopias de las boletas de
votación, a los ciudadanos votantes para
que los colombianos “ejercieran” su derecho al voto o al fraude, según el punto
de vista de las autoridades o de la oposición.
¿En
esta circunstancia de fraude electoral puede el podrido gobierno colombiano
criticar al sistema electoral Venezolano?
Es
bien sabido que el gobierno colombiano obedece a los intereses de su oligarquía
y estos a su vez a los intereses de los EE.UU., motivo por el cual ya el pueblo
colombiano está en situación de alerta ante la arremetida de la burguesía en
contra de los derechos del colombiano de a pie, posiblemente podrían llevar a
Colombia a retomar el camino de la violencia como los ocurridos en el mes de
febrero cuando se produjeron saqueos, esta situación nace y se alimenta de la
injusticia social reinante en ese país vecino.
Bibliografía
Consultada
Se
Llamaba Rafael Urdaneta; valiente, honesto y fiel. De Antonio Pérez Esclarin